por Edu el Dom Ago 24, 2008 8:01 pm
Bueno... Los muñecos de Star Wars no son geyperman ni madelman... Son muñecos articulados de la casa Kenner, de los Estados Unidos, la única que consiguió los derechos...
En cuanto a lo de "juguetes por sexos", cuando yo era muy pequeño, uno de los juguetes a los que más partido le he sacado fue una cocina, con todos sus cacharritos en miniatura. Horas interminables de juego... Y he salido igual de heterosexual que los demás. También conocí a chicas que jugaban al fútbol, y a guerras con las panochas de maíz, y hoy son felices madres de familia...
No obstante, cuando crecí un poco, los "juguetes bélicos" siempre fueron mis favoritos, y cuando mi madre decidió que eso era poco apropiado para los niños, mi hermano y yo nos construíamos las armas con un juego de construcción de piezas grandes que nos regalaron con propósito creativo... Por cierto, de ese juego también salieron, entre oootras muchas cosas, los mandos del hidroavión de "Cuentos del mono de oro", ¿os acordáis de James Cutter?
También tenía unos cuantos Airgam Boys, de la serie de superhéroes, que me dieron millones de horas de juego, quizá más que cualquier otro... ¡Anda que no tuve batallas montadas entre unos y otros!
De mis largos veranos en el pueblo de mis abuelos (Terrer, 500 habitantes) recuerdo que la improvisación era la maestra... Jugábamos mucho en el pajar de unos tíos-abuelos, todos los primos juntos... Normalmente con unos cajones de la fruta vacíos. A veces eran un grupo de aviones... otras veces montábamos un carro de combate... o simples parapetos o trincheras...
Y luego estaban las "guerras de panochas". Con los restos de lo que queda cuando se ha extraído el maíz de su mazorca, hacíamos dos equipos, e Ábamos a las eras del pueblo (abandonadas en su mayoría) a pegarnos de panochazos... Pero no era el típico juego salvaje: había normas estrictas, y cuando uno era alcanzado, levantaba la mano y se retiraba...
También, como no, allá por mis quince años empezamos con los juegos de rol... que casi han llegado a nuestros días, y juegos de ordenador... recuerdo cómo quedábamos amigos o familiares para disfrutar de una partida del famosísimo "Scorch", antecesor del "Worms").
...Y es que los ordenadores que siempre han dicho que sirven para aislarse, en mi caso han servido para justo lo contrario. ¿Será que quien lo dice no conoce de qué habla?
¿Gran guerrero, dices? La guerra no le hace a uno grandioso (Yoda)